sábado, 6 de noviembre de 2010

Clausura del IX Certamen de teatro de Valdemorillo

In Vitro Teatro, con "Entre bobos anda el juego" se alza con el Premio a la Mejor Obra del Certamen; y la obra "Ya van 30", del grupo Melpómene Teatro, logra el puesto de Finalista y el Premio del Público a la Mejor Representación.

El resto de los premios, otorgados a los actores y actrices principales y secundarios; al mejor montaje; y a la mejor dirección, quedan repartidos entre cuatro de los siete grupos concursantes.



…“Molière dijo: La improvisación es la verdadera piedra de toque del ingenio… Algunos años antes, Willian Shakespeare dejó escrita otra frase para responderle: Las improvisaciones son mejores cuando se las prepara”.

Con estas palabras, Mayte Cuervo, Técnica de Artes Escénicas de la Casa de Cultura Giralt Laporta de Valdemorillo, presentó la gala de clausura del IX Certamen de teatro de Valdemorillo. Un acto que combinó el reconocimiento al trabajo de todos los grupos de teatro participantes con un pequeño homenaje a una de las especialidades dramáticas que no pueden tener cabida en este tipo de certámenes: la improvisación.

Sobre el escenario, una compañía de teatro improvisa los detalles de la entrega de premios. Cinco minutos antes de que la Gala comience, el camerino es una jaula de nervios y situaciones imprevisibles que ponen a prueba el ingenio y la pericia de estos intrépidos actores.

El resultado fue un acto emotivo en el que el respeto hacia los premiados, participantes, jurado y autoridades, no estuvo reñido con el humor y la espontaneidad desplegada por los actores de COVAL.  Una cuidada iluminación, y la proyección de numerosas instantáneas sobre las actuaciones de los grupos concursantes, vistieron de luz y sonido a una ceremonia en la que también hubo espacio para mencionar a un par de genios de la dramatización escénica, como son Alejandro Jodorowsky y Leo Bassi.

Mediado el espectáculo, la imprevisibilidad del acto fue interrumpida por la puesta en escena de un corto que, a manos de Maribel y José Ignacio (también integrantes de COVAL) hizo sonreir y enternecer al público asistente con una de esas historias que ninguno estamos exentos de poder vivir. Y es que algo tan cotidiano como un paseo en metro, puede convertirse en toda una aventura…

En definitiva, vivimos una noche en la que teatro y ceremonia compartieron un idilio bajo el auspicio del humor y la imprevisibilidad.

3 comentarios:

  1. Hola, os pido permiso para reproducir en Sierra Oeste (valdemorillo.com) esta crónica.
    Salud
    Carlos

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  2. Hola Carlos. Por supuesto que puedes reproducirla. Será todo un honor que nuestra fuente sea citada en Sierra Noroeste (lo mismo hasta nos vuelves a hacer un hueco entre tus enlaces favoritos)... Cualquiera de estos días nos vemos y nos tomamos unas cañas.

    Javier

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